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JIMINY SELF-HELP HANDBOOK 4
Competencias: Autorreflexión, búsqueda de oportunidades, iniciativa, fijación de objetivos,
persistencia, compromiso, asunción de riesgos calculados, toma de decisiones eficaz, resolución de
problemas, búsqueda de información, mejora de la mentalidad.
2. ANTECEDENTES TEÓRICOS
2.1. Visión general de un estilo de vida y una mentalidad empresarial
¿Quién es un "empresario" y qué significa realmente tener un estilo de vida y una mentalidad
"empresarial"? Literalmente, el préstamo de la palabra "emprendedor" se remonta al antiguo
vocabulario bélico francés del siglo XVIII, donde "entreprende" significa "emprender", un acto que
combina estrategia, organización y riesgo. El término se utilizaba entonces para describir al "gestor o
promotor de una producción teatral", otro acto arriesgado que también exige colaboración y
creatividad. Hoy en día, al buscar la palabra en un diccionario, podemos ver que se refiere
principalmente a "una persona que organiza y gestiona cualquier empresa, especialmente un negocio,
normalmente con considerable iniciativa y riesgo". Además, los empresarios pueden vender cualquier
cosa: desde productos hasta servicios y desde información hasta atención.
Pero, ¿es esta definición suficiente? De hecho, como vamos a discutir, tener una mentalidad
emprendedora no consiste únicamente en crear empresas, sino que es una forma de afrontar los
riesgos y desafíos de la vida. Por lo tanto, en esta subsección nos centraremos en la definición y la
importancia de la mentalidad empresarial y resumiremos las características más esenciales de la forma
de pensar de un empresario de éxito como base para identificar formas efectivas de actualizar la
mentalidad de uno y mejorar su actitud empresarial y su enfoque hacia la vida cotidiana.
Qué es el pensamiento empresarial y por qué es importante
Aunque la "vertiente técnica empresarial" es sólo uno de los muchos aspectos (y normalmente
sobredimensionados) de ser empresario, empezaremos por esta vertiente porque "la era del espíritu
empresarial" ya está aquí y evolucionará de forma aún más dinámica mientras que, especialmente
para los más jóvenes, ya no hay garantías de una larga carrera bajo un solo empleador o incluso en
una sola industria o sector.
En primer lugar, debemos darnos cuenta de que cualquiera puede ser empresario, pero no todos van
a tener el mismo nivel de éxito. Y lo paradójico es que los empresarios no son necesariamente buenos
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propietarios y gestores de empresas . No hay requisitos previos ni una "mejor manera" de convertirse
en empresario. El espíritu empresarial requiere mucha experiencia, determinación, planificación y, a
veces, educación, mientras que cada empresario tiene un historial diferente y un conjunto único de
motivaciones, activos y defectos. También es crucial entender que incluso las mejores ideas de negocio
pueden fracasar en diferentes circunstancias. Sin embargo, el pensamiento empresarial puede reducir
las posibilidades de fracaso y dar a la empresa más posibilidades de éxito.
Aunque cualquiera puede ser empresario, obviamente no todo el mundo es aficionado a emprender.
Además, un empleo es un trabajo que hacemos principalmente para ganar dinero, mientras que una
carrera profesional es un compromiso para trabajar en un campo o industria. Sin embargo, incluso
aquellos que temen los riesgos, la carrera y el espíritu empresarial y prefieren trabajar como
1 Green, Mike (2017), "Desarrollando la mentalidad de emprendedor", en Michelle Ferrier & Elizabeth Mays
(eds) Media Innovation and Entrepreneurship, disponible en línea https://press.rebus.community/media-
innovation-and-entrepreneurship/chapter/developing-entrepreneurial-mindset